Generalmente la información para bajar de peso está dirigida a las mujeres. Esta es una situación que invita a reflexionar profundamente sobre la realidad de los hombres que necesitan o desean eliminar los kilos que tienen de más.
Porque adelgazar es una cuestión de hombres y mujeres, es por eso que hemos realizado estos tips para bajar de peso enfocado a tu sexo.
Es así como ha surgido este post, procurando ubicar en igualdad de condiciones tanto a hombres como a mujeres interesados en bajar de peso, mejorar su salud o cambiar sus hábitos. Sin desconocer obviamente las diferencias entre sexos que son de órdenes fisiológicas, biológicas, sicológicas, de comportamiento, entre otras.
Esta tendencia a pensar más en las mujeres que en los hombres, guarda coherencia con estudios que sugieren una mayor exigencia social de mostrar una figura delgada en el caso de las mujeres. También se les atribuye un mayor interés por cuidar su apariencia física. Sin embargo, cuando de perder peso se trata, las razones que impulsan tanto a hombres como a mujeres a tomar esa decisión, terminan siendo los puntos comunes entre tantas diferencias.
Tips para bajar de peso
Temas
Aquí te vamos a dar unas ideas, unos pequeños tips, sobre cómo enfocar tu situación en caso de que bajar de peso es lo que sueñas y quieres en este momento de tu vida.
Estos tips para bajar de peso que damos los hemos enfocado y dividido para hombres y mujeres, porque como ya dijimos somos muy diferentes y tenemos necesidades que difieren, pero también procesos que cada uno debe llevar a cabo según como es.
Para ellos
Vamos a explorar algunas técnicas y métodos que han dado resultado para el lado masculino de esta historia.
Todo debe iniciar con la aceptación del sobrepeso, bien sea porque tu estado de salud lo manifiesta o porque notas que tu masa muscular y peso, han aumentado considerablemente.
Una vez aceptes que hay algo en que trabajar para mejorar tu salud, el siguiente paso es decidirte y tener unas rutinas para bajar de peso, sea porque el médico tratante así lo ha recomendado o porque no quieres dilatar más el asunto.
Lo que viene después, es elegir uno o varios métodos que puedan aplicar para tu caso, por razones de tiempo, dinero o estado de salud.
Empezaremos hablando de las dietas, estas son recomendadas por un gran número de los expertos de la nutrición, sin embargo tendemos a pensar que su éxito depende de factores externos olvidando que son el orden mental y la constancia con que se lleven a cabo, lo que realmente garantiza que logres bajar de peso.
Una dieta recomendada está basada en evitar el consumo de azúcar, grasas, harinas (sustituidas por cereales integrales) y alimentos con alto contenido de calorías.
A esto debes sumarle el respeto por las tres comidas principales del día, la dosificación adecuada de los alimentos en cada porción y el alto consumo de frutas y verduras.
Como complemento de la dieta, la actividad física es sumamente importante. Según expertos en el tema, los hombres tienden a bajar más rápido de peso cuando practican ejercicio. Esto se debe a la tenacidad con la que muchos realizan sus actividades físicas, lo que facilita que se quemen calorías rápidamente.
Si eres de los que se ejercita regularmente, es probable que no tengas inconveniente con aumentar las repeticiones e incorporar pesas a tu rutina diaria.
Si por el contrario, has sido poco amante del ejercicio, un buen inicio puede ser trotar, caminar o inscribirte en un gimnasio donde comiences con técnicas que irás perfeccionando gradualmente.
Para ellas
En el caso de las mujeres, debes comenzar por equilibrar entre los dos extremos de la situación: el estrés que esto te genera y la falta de motivación para tomar medidas al respecto.
No podemos desconocer que en el tema femenino, hay factores hormonales que terminan afectando el peso, por eso es muy importante descartar inicialmente cualquier trastorno de salud que pueda estar asociado a los «kilitos» que has ganado de más.
Una vez tengas eso claro, la actitud con la que emprendas la misión de bajar de peso, será determinante. Ten presente siempre que reúnes en un solo cuerpo: inteligencia, sentimientos, expectativas, necesidades físicas y emocionales, y que siempre vas a ser la encargada de que este proceso avance, se paralice o retroceda. - Twitéalo
Así las cosas, las dietas también son la primera recomendación para ti en este artículo, pues nuestro cuerpo es el reflejo de lo que estamos consumiendo. De ahí que sea muy importante comenzar por un cambio de mentalidad donde lo más importante es cuidar tu salud y bajar de peso en ese camino.
Hago énfasis en esto porque reconozco que no es fácil cambiar los hábitos alimenticios, principalmente por el cambio de sabores y texturas. No es lo mismo deleitar tu paladar con una tortilla de carne y vegetales bañados en salsa, a refrescarlo con una porción de verduras al vapor en su estado y sabor natural.
¿Qué comer entonces?
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Lo ideal es que comiences a sustituir alimentos que generalmente ingieres y que representan grasa y calorías para tu organismo. Para darte un ejemplo, lo que son las salsas, los helados, las gaseosas, las frituras, las harinas, la mantequilla o margarina, los aceites, las carnes grasas, los chocolates, los confites, entre otros alimentos, deben ser reemplazados por cereales integrales, por presentaciones light o descremadas de lácteos, por frutas, verduras, y comidas al vapor o asados (sin grasa).
Todo se resume en aprender a comer y adoptar hábitos saludables de vida, - Twitéalo pues precisamente bajar de peso está asociado con todos los otros escenarios en que te desenvuelves.Aquí es donde puedes añadir a tu dieta, elementos como:
Ejercicios como: la gimnasia, el yoga, la natación y otras actividades físicas que te ayuden con la digestión de los alimentos y de paso a tonificar los músculos que están perdiendo grasa.
Rodearte de personas que puedan estar pasando por procesos similares, favorece el intercambio de experiencias y la adaptación a nuevos hábitos de consumo.
La familia también tiene un papel importante en esta historia, pues la idea es que si tienes hijos o esposo, los estilos de vida saludable puedan transmitirse a todos.
En ambos casos, todo se resume a aprender a comer sanamente y a tener actividad física, así no sean rutinas de ejercicio intensas como las que tienen por costumbre muchos hombres, lo importante es aprender a movernos y crear hábitos que nos ayuden en nuestro proceso de sentirnos bien con nosotras mismas.
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