Está muy de moda el controlar lo que comes, no solamente tú sino toda la familia. Aunque llevar una dieta para todos es complicado por el gusto de que cada uno tiene y sobre todo porque no todos necesitan ponerse a régimen o les gusta comer más sano.
En mi casa es un caso porque allá se come lo que hay, sin ponernos a pensar que lo que nos estamos llevando a la boca nos va a ser bajo en calorías, va a estar rico en proteínas o simplemente nos hará aumentar de peso.
Algo que he visto y comprobado en mi misma es que las tales dietas son solo propaganda, que con dejar de comer las harinas casi que se tiene el resultado esperado. En mi caso no es así. Lo mismo pasa con el azúcar, que no es mucho lo que rebaje, actualmente llevo más de un mes sin tomar líquidos azucarados como lo hago en casa, donde desde el desayuno, hasta la comida, todo está endulzado con azúcar o panela.
En cambio aquí la sobremesa es agua todo el tiempo, o sea que si fuera por eso ya debería estar mas delgada y eso aún no lo noto.
Igual pienso que cada cuerpo es un mundo diferente, todos tenemos 2cuerpos extraños» que se esponjan o se desinflan según algunas comidas.
También he notado que la ansiedad hace que no se vean resultados por más cosas que se hagan. Mientras que no nos aceptemos como somos, cada día es más trabajoso que los alimentos hagan su digestión debidamente.
Desde pequeños los niños deben alimentarse adecuadamente para que no tengan problema de obesidad, tener un buen cuidado en la alimentación para ellos es indispensable. Porque si los obligamos a comer de todo, muchas veces lo único que hacemos es engordarlos y luego cuando ellos quieran ser delgados no les va a quedar tan fácil este proceso.
Acaso no conoces a madres que cuando el niño no quiere comer los obliga a tragar con correa en mano y por miedo ellos comen todo sin importar si les gusta o no.
Tengo una amiga que cuando su hija era pequeña la sentaba a la mesa y hasta que no terminaba absolutamente todo lo que le servia no la dejaba parar. La niña lloraba por que ya no quería más, día que estaba llena y la mamá le decía: «no señorita, hasta que no termine no se levanta» y sacaba la correa y la colocaba encima de la mesa.
Pues entre lagrimas y mocos la niña se comía todo, pero ya los alimentos creo que ni le alimentaban, pues para ella era una tortura china cada que tenia que comer.
Ahora adulta la chica es gordita y vive haciendo una y otra dieta para tratar de rebajar y a veces lo consigue cuando se pone juiciosa tomando suplementos alimenticios como los de la marca Nestle: optifast que se consiguen en el pueblo, pero el problema es que no puede cerrar el pico y al momento vuelve y sube. Se la pasa en este vaivén y en este desespero de ella por rebajar lo que le sobra, pero el cuerpo no le hace caso.
He notado que en muchas casas es la lucha y la alegadera con los hijos para que coman y se oye el escándalo en las horas de las comidas. Es los peladitos llorando por que eso no les gusta, porque quisieran otra cosa y las mamás empecinadas en alimentarlos a la fuerza.
Confieso que eso me da un desespero, será porque nunca me ha gustado las cosas a la brava. Desde pequeños mis hijos comían si querían, no sé como no crecieron todos desnutridos y flacuchentos.
Ahora adultos ya comen hasta piedras, de hecho mi hija es vegetariana y yo la veo tan sana y rozagante como siempre, eso sí se cuida con suplementos ricos en proteínas que ahora ya no consume y su peso siempre está bien y de hecho hace poco el médico le dijo que tenía que bajar algunos kilos.
En fin este meollo de la alimentación es cosa seria, malo por que coman mucho, malo si comen poco.
Creo realmente que antes nos levantaban sin tantas arandelas y somos más sanos que las personas que hoy día que se cuidan de comer esto o aquello. Para mi lo ideal es poder comer de todo sin que nos caiga mal, ya lo demás son puras carajadas ¿No te parece?
Así que para controlar lo que comes es indispensable saber cómo fue tu infancia, tener mucha fuerza de voluntad y sea que te guste o no la carne, contar con suplementos alimenticios, porque lo cierto es que por más que comamos de todo, no siempre comemos bien y eso hay que cuidarlo con ayuda, muchas veces.
Así que sigue tu instinto y sobre todo, aprende a comer bien. Eso siempre es importante para tener una vida más sana.
Diana Garcés dice
Lo cierto es que controlar lo que comes es más complicado de lo que imaginamos, estoy segura que muchas lo intentamos, pero conseguirlo es la tarea a la que nos enfrentamos y que si se logra es genial para nuestro cuerpo 🙂
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Dimiga dice
Y es en lo que debemos trabajar 🙂
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Ser Padres Primerizos dice
Al principio me parecia dificil controlar mucho lo que comia, ahora lo estoy haciendo mucho mejor, trato de comer mas sano aunque aveces peco, pero quiero lograrlo seguro con un poquito mas de deciación
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Dimiga dice
Todas pecamos, no te des tan duro por ello, se pueden hacer buenos cambios, pero todo poco a poco 🙂
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Victor Garcés dice
Yo quisisera controlar lo que como, pero es muy dificil la verdad, trato de comer sano y me gusta pero no me llena como normalmente lo hace la comida tradicional, un poco de mas no esta mal, pero si es dañino para nuestro cuerpo.
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Dimiga dice
jajaja es que tienes un problema para cerrar el pico, hay que revisar si es un tema de familia 🙂
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SIBARITISMOSDEINMA dice
la verdad es que tendría que controlar mas lo que como.
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Dimiga dice
Pues mucho ánimo con ello guapa 🙂
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Mi meta, tu salud. Carolina dice
¡Hola!
Aunque no soy partidaria de según que tipo de dietas, sí es necesario que controlemos los alimentos que vamos consumiendo.
Hoy en dia, y por suerte, en el mundo alimenticio hay un gran abanico de posibilidades, y aunque a veces pueda costar un poco adaptarse a nuevos alimentos, vale la pena hacer el pequeño esfuerzo, por y para la salud.
Besos
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Dimiga dice
Muy bien dicho guapa, no todas las dietas son para todos y siempre hay que tener mucho cuidado, pero siempre pensar en la salud y mezclar bien los alimentos es importante 🙂
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Algo especial dice
Sé lo que como y cuánto como. De momento, ed algo que no me preocupa. Estoy bien de salud y sé que hay que comer de todo un poco sin abusar.
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Dimiga dice
Así es guapa y cuidarte siempre, es importante 🙂
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Marta Ro dice
Tienes razón en que la alimentación que funciona para uno no tiene por qué funcionar para todos. Cada cuerpo es un mundo, cada uno tenemos nuestro metabolismo y nuestro tipo de vida, y nuestra alimentación deben ser adecuados para nuestro caso concreto y no para nadie más. Las dietas restrictivas sin duda son más perjudiciales que beneficiosas, para mí como tú bien dices, el secreto está en poder comer de todo siendo conscientes de la necesidad de cuidarse, pero sin llegar a obsesiones que no traen nada bueno…
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Dimiga dice
Es así guapa y por eso nos toca poner mucho cuidado con las dietas que hacemos, pues no todo lo que vemos o leemos nos va a funcionar 🙂
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Sandra G. dice
Buenas!
La verdad es que he alucinado con el ejemplo de la niña y de la correa de la madre… Yo soy mamá de un hijo de casi dos años y jamás se me ha ocurrido hacer algo así. Mi pequeñajo come de todo: frutas, verduras, hortalizas, pasta,etc… Y claro que hay verduras u otros alimentos que no le gustan, pero se los cambio por otros de la misma clase que sí, además de ir añadiendo ingredientes nuevos para que pruebe.
Yo creo que hay que ser flexibles en el tema de la alimentación y como bien dices, respetarse, quererse y aprender a comer!
Yo soy todo lo contrario, he comido siempre fatal y desde hace tres años me estoy reeducando en el ambito alimenticio. No me quito de nada pero intento añadir más cosas sanas a la dieta y rebajar los alimentos que no le hacen bien a mi salud.
Un besito muy grande y muy buena reflexión!
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Dimiga dice
Guapa, pues a seguir así y genial que no eduques a tu bebé con una correa al lado para la comida, eso no creo que ayude a nadie a la final 🙂
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Gladys dice
¡Hola!
A mi siempre me ha gustado comer sano y llevo casi un año llevando un control estupendo de mi alimentación. En menos de 4 meses perdí 12 kilos que había cogido con tratamiento de cortisona junto s otros 3 más. Y la verdad es que no me costó demasiado perderlos, pero sí disciplina, paciencia y constancia hasta conseguir hacer de la buena alimentación mi estilo de vida.
Procuro no consumir harinas refinadas. No me gustan mucho los dulces, ni los fritos y siempre estoy buscando recetas ricas y sanas para que la dieta sea un placer y no una tortura.
Me ha sabido fatal lo que cuentas de madres que obligan a sus niños a comer y la consecuencia mala es que luevo cuando crecen se vuelve obesos y ansiosos. Es una pena. Espero que eso cambie.
Un saludo.
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Dimiga dice
Guapaes verdad que se requiere disciplina, paciencia y mucha constancia para que haya buenos resultados. Lo de los niños, esperemos que sea cosa del pasado y que ya no pase 🙁
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Alexandra Dacier dice
Yo creo que cada quien es libre de comer lo que quiera siempre y cuando no afecte nuestra salud.
Hace poco una amiga quería controlar lo que yo comía, diciéndome comentarios de que voy a ponerme gorda y etc.
Intenté ser muy educativa y la envié a la mierda con mucho amor.
Excelente post.
Saludos.
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Dimiga dice
Bueno, es que así toca a veces guapa, la gente siempre quiere meterse en la vida de uno y está súper bien saber cuándo decir «basta» y sacar del paso a las personas que quieren controlarnos 🙂
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Marta C. dice
Si que es importante tener cuidado con lo que se come y procurar evitar la ansiedad porque eso suele llevar a que el apetito nunca se sacia ingieras lo que ingieras, pero creo que en ese aspecto hay también un componente psicológico como respuesta a una situación de estrés. En ese caso creo que también es importante la intervención de un especialista más allá del que te marca unas pautas de alimentación sana. Un besote.
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Dimiga dice
Muy de acuerdo guapa, cuando la cosa se nos va de las manos y deja de ser algo que podamos controlar, lo mejor siempre es buscar la ayudar de un especialista, no podemos confiarnos y luego estar mal 🙁
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Vanesa dice
Me ha gustado mucho este post. Con mi hijo hemos tenido muy mala experiencia con la comida: estábamos muy presionados porque comiera esto y lo otro cuando a él no le llama la atención y ahora estamos en un proceso de dejar que él decida qué quiere comer, es decir, le ofrecemos lo que hay y si no quiere ya comerá. Estamos todos mucho más relajados que antes que todo eran gritos y la hora de la comida una tortura, espero que él olvide eso y empecemos de nuevo con una relación mucho más sana. Desde luego si tengo otro no caeré en eso. Muaks
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Dimiga dice
Genial estrategia guapa, creo que lo mejor es dejar que los peques decidan un poco 🙂
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